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sábado, 23 de febrero de 2013

La gallina de los huevos de oro

La representación de obras de teatro, tanto con marionetas como físicamente, es un buen recurso para trabajar la comunicación lingüística y la comprensión de textos, entre otras cosas. 

El trabajo en equipo ha estado presente una vez más. Esta vez, hemos formado grupos de tres componentes. Los grupos los hemos ido formando a medida que iban llegando los niños y niñas, siendo una forma fácil y rápida así como heterogénea a la hora de formarlos.

La metodología ha sido la misma que llevamos a cabo en la sesión en la que hicimos la anterior representación teatral, aunque esta vez hemos representado la obra a través de marionetas.

La obra seleccionada ha sido la de "La gallina de los huevos de oro", una obra sencilla, ajustada a las edades de los niños y niñas que participan en el programa, y con una buena moraleja.


A partir del trabajo en equipo y la buena disposición de los niños y niñas hemos conseguido pasar un buen rato y aprender los unos de los otros con la posterior evaluación grupal, destacando algún punto positivo y negativo de cada uno de los "actores". 




miércoles, 13 de febrero de 2013

NEOFOBIA ALIMENTARIA



La preferencia por alimentos concretos es un gusto creado desde la infancia y la experiencia es uno de los factores más importantes en su determinación.

Puede definirse el concepto de neofobia alimentaría como el miedo a la incorporación de nuevos alimentos en la dieta ya sea por no conocer los sabores, los olores, las texturas o las formas de los alimentos que se presentan.

Las influencias en la alimentación del niño condicionan la preferencia por determinados alimentos. Desde pequeños, los niños y niñas como tendencia natural, rechazan los alimentos amargos y aceptan los dulces. Algunos estudios muestran que las preferencias alimentarias vienen ya desde la lactancia, ya que el lactante experimenta a través de la leche, la alimentación de la madre.

Uno de los momentos más importantes en la alimentación del infante es al dejar la leche materna, en ese momento es cuando se inician algunas de las fobias. Normalmente los primeros alimentos que se incluyen en la alimentación son las frutas y uno de los errores de las madres es cambiar el tipo de fruta en cuanto el niño tiene una reacción ya que creen que el factor que la provoca es el mal gusto. Sin embargo, es normal que el niño reaccione, pues se trata de un sabor que no conoce, distinto de los que había experimentado en sus primeros meses de vida. La perseverancia es positiva en la creación de buenos hábitos, y es por eso que se debe dar a probar un alimento varias veces para la aceptación del mismo y el desarrollo de las papilas gustativas. Esto mismo ocurre con el caso de las verduras donde la responsabilidad total recae en la actitud de los adultos.
 
Podemos marcar como segundo momento crucial la edad comprendida entre los dos y tres años cuando su toma de contacto con el mundo lo experimentan saboreando todo lo que encuentran a su paso. En esta etapa se hace más difícil la incorporación de alimentos que no se han incluido antes en los menús.
Esta aversión es una causa del empobrecimiento en la dieta, pues generalmente la fobia se muestra hacia las verduras y las comidas proteicas. Algunos estudios hacen hincapié en que la causa principal de estos rechazos es la presentación que se les da además de porque si no se la comen no se les ofrece. 
 
La fobia de los alimentos parece tener una excepción: los dulces. Esto se ve relacionado en determinados artículos con el consumo de la leche, ya que esta contiene azúcar y genera emoción en los infantes.
Un error de las madres suele ser el endulzar los alimentos que los niños rechazan pues de esta forma consiguen que persevere la aversión al alimento y aumentan los riesgos de caries. Cuanto más natural se presente el alimento mucho mejor.

Consejos ante el trastorno:
  • Variar las comidas con todos los tipos de alimentos
  • Incorporar los nuevos alimentos uno a uno, en pequeñas cantidades y de forma repetida
  • Si no acepta el alimento la primera vez que se le presenta, no se le debe dar al día siguiente ya que puede provocar una asociación con experiencia traumática y así incrementarse el rechazo.
  • No rendirse ante la aversión
  • No cambiar el nuevo alimento por uno ya conocido aunque no le haya gustado facilitará la incorporación.
  • Buena presentación de los nuevos platos
  • Ofrecerlos con la temperatura adecuada.

Hoy en día los casos de neofobia pueden verse extendidos en gran medida y no solo en los más pequeños de la casa. La emigración es un factor social que se ha incrementado en estos últimos años. Nuevos lugares, nuevos idiomas, nuevos amigos, nuevas actividades, nuevos alimentos.. nueva cultura..

El acceso a los alimentos que una persona consume en su propio país puede resultar complicado en el extranjero a pesar de los movimientos de exportación que existen, tanto por razones económicas como por que no podemos disponer en cualquier momento de lo que nos gustaría. Esto hace que la adaptación a la alimentación de las nuevas culturas sea casi tan obligatorio como importante.

Los adultos que de pequeños han adquirido buenos hábitos alimenticios, suelen tener más fácil la adaptación. Sin embargo, son todos los que se encuentran ante nuevos alimentos y la fobia puede presentarse incluso ante aquellos que nunca creerían experimentarla en la edad adulta.

Como experiencia personal, diré que no pensaba que el cambio de país fuera a implicarme ningún problema en lo que a la nutrición se refiere. Aun así, cada vez que me presentan algo nuevo reacciono como esos niños que rechazan la segunda cucharada el primer día que se les presenta la fruta. La primera vez ni si quiera saboreas, la tercera puedes ser capaz de juzgar su gusto.

Londres es una ciudad multicultural y aquí no resulta imposible encontrar una tienda con los productos alimentarios del país que se te antoje. Sin embargo, esto no ocurre en otros países y la única forma de enfrentarse a ello es seguir las mismas reglas que de pequeños seguían con nosotros y aunque resulte más difícil por estar en edad adulta el reto se consigue: prueba, saborea, juzga...

Cristina Sureda de Lucio

lunes, 11 de febrero de 2013

Hola a tod@s!

Esta semana hemos seguido trabajando la lectura, está vez con Machado, mediante la poesía. Los niños y niñas tenían que expresar a los demás lo que el autor pretendía transmitir con el escrito, para ello debían aprenderse uno de los versos y posteriormente recitarlo, de tal manera que entre todos los niños y niñas recitábamos la poesía completa. 

¡Es impresionante la capacidad de memorizar que tienen!, sinceramente me han dado mucha envidia,... ¡ya me gustaría aprenderme así de rápido los exámenes!

Me ha gustado mucho una poesía que me ha entregado una de las niñas del grupo de los mayores, paso a transcribirla porque creo que os gustará:

¿La poesía? ¿la vida?

Cuando empiezas,
cuesta expresar tus sensaciones.
Podría ser causa de la vergüenza,
tal vez, por saber quien la está leyendo.
Es justamente como me siento en este momento.
Pero después,
 te hace sentirte tan libre como
el más bello pájaro por el viento.

En unos pocos versos te cuento algo de mi vida,
bueno, algo que siento en este día,
en este momento, en esta milésima de segundo.
Y espero estar seguro
de lo que quiero hacer en este verso.
En este mundo.

Y ahora es cuando comienzo a expresarme,
 me es muy difícil empezar,
y también acabar.

No sé mucho sobre esta vida,
pero de lo poco que soy, sé vivirla.
Se tiene sus momentos,
la vida es bipolar,
es... ¿cómo definirla?,... Adolescente.

No critiques de esta poesía 
ya que cada persona tiene pensamientos diferentes, 
hasta se trata de forma indiferente.
Mas no hagas caso del siguiente verso,
porque existe y a la vez, 
no existe.

Sólo sabemos una cosa,
que no sabemos nada.
(Inspiración en Sócrates)  
A. B 11 años



¡Hasta la semana que viene!